El administrador concursal juega un papel crucial en los procedimientos de concurso de acreedores, con el objetivo de obtener el mejor resultado posible para el deudor y para los acreedores. Su función principal es analizar la situación económica del concursado y gestionar el proceso de forma justa y eficiente. Aquí te explicamos en detalle sus funciones y cómo es designado.
¿Qué es un Administrador Concursal?
El administrador concursal es la figura responsable de dirigir el proceso de concurso de acreedores, tomando decisiones que beneficien a todas las partes involucradas, ya sean los acreedores o el propio concursado. Su labor se encuentra regulada en el capítulo II del título II del libro primero de la Ley Concursal.
Funciones del Administrador Concursal
La responsabilidad fundamental del administrador concursal es asegurar que el concurso de acreedores cumpla con su doble objetivo: maximizar el pago a los acreedores y, en la medida de lo posible, mantener la continuidad de la actividad del concursado. Entre sus principales funciones destacan:
Elaboración de un Informe Completo:
- Análisis de la memoria y documentos que presenta el concursado.
- Evaluación de la situación contable y patrimonial del concursado.
- Elaboración de una lista de acreedores y de créditos contra la masa, con los vencimientos respectivos.
- Evaluación de la propuesta de convenio, si existe, y sus posibles implicaciones para los acreedores.
- Presentación de Documentos Complementarios:
- Inventario de la masa activa.
- Relación de los litigios en curso.
- Evaluación de la viabilidad del negocio en caso de que continúe la actividad.
- Gestión Administrativa y Financiera:
- Cumplimiento de las obligaciones fiscales, laborales y contables de la empresa en concurso.
- Negociación de acuerdos y formalización de contratos.
- Convocatoria de juntas y asambleas de los acreedores.
Retribución del Administrador Concursal
El administrador concursal recibe una retribución que se establece en el Real Decreto 1860/2004, y que se carga a la masa activa del concurso.
Composición de la Administración Concursal
Por regla general, la administración concursal está compuesta por una sola persona. No obstante, en casos de interés público o cuando el juez lo considere necesario, se puede designar un segundo administrador de naturaleza pública.
Requisitos para Ser Administrador Concursal
Las personas naturales o jurídicas inscritas en la sección cuarta del Registro Público Concursal pueden ser nombradas administradores concursales. Los requisitos varían en función de si el candidato es persona física o jurídica:
- Persona física: debe tener la titulación adecuada y superar un examen de aptitud profesional. Excepcionalmente, abogados, economistas, titulados mercantiles y auditores con experiencia pueden quedar exentos del examen.
- Persona jurídica: los representantes deben cumplir los mismos requisitos que una persona física.
Prohibiciones y Restricciones
Existen ciertas prohibiciones para asegurar la imparcialidad del administrador concursal:
- No pueden ser administradores concursales quienes hayan trabajado profesionalmente para el deudor en los últimos tres años.
- Se excluye a quienes hayan sido separados de su cargo como administradores concursales en los últimos tres años.
- No podrán ejercer como administradores quienes presenten conflicto de interés con el deudor o con acreedores significativos (con al menos el 10 % de la masa pasiva del concurso).
El administrador concursal, por tanto, debe cumplir con estrictos requisitos y realizar funciones esenciales para la transparencia y efectividad del proceso de concurso, en beneficio de todas las partes involucradas.