Cuando una persona se enfrenta al riesgo de embargo por deudas, una opción que muchos consideran es cambiar la titularidad de sus bienes para evitar perderlos.
Sin embargo, esta práctica, aunque tentadora, puede ser peligrosa y tener consecuencias legales graves. En este artículo te explicamos por qué no deberías hacerlo y qué alternativas existen para protegerte legalmente.
¿Qué es un embargo y cuándo se aplica?
El embargo es una medida legal de ejecución que permite retener bienes del deudor para subastarlos y así saldar la deuda pendiente. Generalmente, este proceso requiere una orden judicial, salvo en deudas con Hacienda o Seguridad Social, donde el embargo puede iniciarse sin orden judicial previa.
¿Pueden embargar un coche o una propiedad?
Sí. Según la Ley de Enjuiciamiento Civil, los bienes muebles (como coches) e inmuebles (como casas) pueden ser embargados. Aunque normalmente el embargo comienza por dinero en cuentas bancarias, si no se encuentra suficiente saldo, se procede con otros bienes.
Por ejemplo, si tienes una deuda de 80.000 euros y un coche económico con más de 20 años, probablemente no se embargue por su escaso valor. Pero si el vehículo es reciente o de gama media/alta, sí puede ser embargado.
Evitar embargo con titularidad: una estrategia peligrosa
Cambiar la titularidad de bienes para evitar un embargo puede parecer una solución rápida, pero es una acción ilegal. Esta práctica puede considerarse un delito de alzamiento de bienes, según el artículo 257 del Código Penal.
Este delito se comete cuando alguien oculta o transfiere bienes a terceros con la intención de evitar el pago de una deuda. Las penas pueden ser de uno a cuatro años de prisión y multas de hasta 24 meses.
¿Qué alternativas legales existen para evitar el embargo?
En lugar de intentar evitar embargo con titularidad, existen opciones legales y seguras para proteger tu patrimonio si no puedes pagar tus deudas:
- Pagar la deuda: Puedes frenar el embargo si pagas la cantidad pendiente, incluidos intereses y costas judiciales, antes de que se subaste el bien.
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Acogerte a la Ley de la Segunda Oportunidad: Esta ley permite reducir o cancelar deudas mediante dos vías:
- Liquidación del patrimonio: Vendes todos tus bienes (incluida la vivienda habitual) y se cancelan todas las deudas.
- Plan de pagos: Conservas tu vivienda y pagas solo una parte de la deuda con cuotas adaptadas a tu capacidad.
Iniciar este proceso suspende automáticamente cualquier embargo en curso, lo que da tiempo al deudor para negociar y buscar una solución estable.
Evitar embargo con titularidad no es la solución
Proteger tus bienes transfiriéndolos a familiares o amigos puede parecer una salida fácil, pero en realidad puede ser muy perjudicial. La justicia puede revertir esas transferencias y, además, iniciar un proceso penal por alzamiento de bienes.
La mejor manera de afrontar una deuda es buscar soluciones legales que permitan aliviar la carga financiera sin riesgos. La Ley de la Segunda Oportunidad es una herramienta eficaz para empezar de nuevo de forma segura y legal.
Conclusión
Si estás pensando en evitar embargo con titularidad, piénsalo dos veces. No solo podrías empeorar tu situación legal, sino que también podrías poner en riesgo a las personas a las que transfieres los bienes.
Optar por asesoramiento legal y soluciones legítimas es la mejor forma de proteger tu patrimonio sin infringir la ley.
Evitar embargo con titularidad: lo que debes saber